Perdidos en el Espacio es una historia clásica de la Ciencia-Ficción que lleva con nosotros más tiempo del que nos podemos imaginar. Muchos de nosotros tuvimos nuestro primer contacto con la saga con la película de 1998 protagonizada por Matt LeBlanc y Gary Oldman entre otros. Los más experimentados lectores recordarán la serie original de 1965, que se inspiraba en una novela de 1812 titulada El Robinson suizo. En 2018 Netflix decidió que esta generación necesitaba un nuevo Perdidos en el Espacio y se puso manos a la obra. El 13 de abril de 2018 nos presentó diez capítulos que describían las penurias y sufrimientos a los que la familia Robinson era sometida en su odisea espacial. Este 24 de diciembre Netflix estrenó la segunda temporada de la nueva versión de las aventuras de esta familia con muy mala suerte.
OJO: Spoilers a partir de aquí. Estáis avisados.
La premisa de esta re-imaginación de Netflix sigue siendo bastante fiel a la clásica. La familia Robinson es elegida para colonizar un planeta habitable recién descubierto en Alfa Centauri. Sin embargo, pequeños cambios se han introducido en esta versión para darle un nuevo aire. Tras una misteriosa explosión en la nave colonizadora, la Resolute, los Robinson y otras familias se ven obligados a evacuar en las naves de superficie Jupiter y aterrizar en un planeta cercano. Después de este fuerte comienzo, las penurias para los Robinson no terminarán nunca: entornos hostiles, compañeros traicioneros y robots extraterrestres. En este caso, un gran protagonista es el robot, que se separa bastante del visto en previas versiones. En este caso, estamos ante un alienígena que hace buenas migas con el menor de los Robinson, Will.
Entre todas las desgracias que les suceden a los Robinson, destacan en la trama principal descubrir quién atacó la Resolute y les dejó náufragos en primer lugar. Según avanza la trama iremos descubriendo más sobre los orígenes del robot, que terminará sacrificándose por salvar a la familia. Además de los peligros de la supervivencia en la superficie, los Robinson tendrán que tratar con la Dr. Smith, otra superviviente de la Resolute, que oculta un oscuro pasado.
Como era de esperar, en esta nueva temporada las calamidades no terminan para la familia, que empiezan intentando escapar de un planeta con una atmósfera tóxica y mayoritariamente agua. Mientras intentan arreglar la Jupiter y escapar de la trampa mortal que supone el planeta, los Robinson encontrarán construcciones que parecen pertenecer a la misma civilización que construyó el robot de Will, ahora desaparecido. ¿Conseguirán sobrevivir y encontrar el camino de vuelta a casa o seguirán perdidos en el espacio? Sólo Netflix tiene la respuesta.
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